19-09-2024, 01:08 PM
Datos personales:
Apariencia física:
Nahuel es un joven delgado pero fuerte, con cabello oscuro y desordenado, y ojos marrones que pueden ser cálidos y fríos. Suele llevar una chaqueta que oculta tatuajes de su paso por el mundo criminal.
Historia:
Infancia:
Nahuel nació en el corazón de Buenos Aires en 2004, en un barrio donde las familias trabajaban incansablemente para llegar a fin de mes. Su casa era pequeña, pero siempre estaba llena de vida. Los olores a comida casera, el sonido de la radio, y las voces de su familia formaban parte de su día a día. Creció rodeado de amor, pero también de desafíos.
Su padre trabajaba como mecánico en un taller local, un hombre de pocas palabras pero dedicado. Desde muy pequeño, Nahuel lo acompañaba al trabajo, donde aprendió a usar las herramientas y comprendió el valor del esfuerzo. Veía cómo su padre llegaba agotado al final del día, cubierto de grasa, pero siempre con una sonrisa cuando estaba en casa. Su madre, en cambio, trabajaba como empleada doméstica en casas de gente adinerada, lo que la mantenía fuera la mayor parte del día. Cuando regresaba, traía historias del "otro mundo", una vida que Nahuel apenas podía imaginar.
Durante su niñez, Nahuel fue conocido en el barrio por su buen corazón. Era el chico que ayudaba a los ancianos a cargar las bolsas de las compras, el que cuidaba a los más pequeños y siempre estaba dispuesto a colaborar con lo que fuera necesario. Su familia inculcó en él el valor de la solidaridad, lo que lo hizo querido por los vecinos.
A pesar de su bondad natural, Nahuel siempre fue consciente de las tensiones que rodeaban su entorno. Desde pequeño, escuchaba las historias de peleas entre pandillas en las calles cercanas, de robos y ajustes de cuentas. Aunque su familia intentaba mantenerlo alejado de esos temas, él sabía que no podía ignorar la realidad del barrio en el que vivía.
Relaciones tempranas:
Uno de sus primeros amigos cercanos fue Lucas, un chico dos años mayor que él, cuyo padre había muerto en un enfrentamiento entre bandas. A pesar de esa tragedia, Lucas y Nahuel desarrollaron una amistad profunda basada en la lealtad y el apoyo mutuo. Juntos exploraban el barrio, compartiendo sueños de un futuro mejor, lejos de la violencia que los rodeaba. Sin embargo, Lucas comenzó a alejarse poco a poco, atraído por la vida de las pandillas, algo que más tarde también arrastraría a Nahuel.
El conflicto en casa:
Con el paso de los años, la situación en su hogar se volvió más tensa. Su padre, preocupado por la creciente influencia de las bandas en el barrio, advertía constantemente a Nahuel de los peligros. Pero el joven, aunque respetuoso, no podía evitar sentir la atracción de ese mundo. La promesa de protección para su familia y amigos, así como la necesidad de pertenecer a algo más grande, lo empujaron a involucrarse, a pesar de las advertencias.
El momento decisivo para Nahuel llegó cuando tenía 15 años. Un grupo de pandilleros comenzó a acosar a su familia, exigiendo "protección" a cambio de no causarles daño. Aunque su padre intentó enfrentarse a ellos solo, fue Nahuel quien intervino, decidido a defender lo que era suyo. Fue en ese momento cuando comenzó a participar activamente en las calles, convirtiéndose en parte de una de las bandas locales.
Adolescencia de Nahuel Francisco:
Los primeros años de cambio (13-15 años):
A los 13 años, la vida de Nahuel comenzó a cambiar drásticamente. El ambiente en su barrio se volvía cada vez más tenso, con la presencia de bandas criminales que comenzaban a dominar las calles. A medida que crecía, Nahuel fue perdiendo la inocencia de su niñez, enfrentándose a una realidad en la que la violencia y la delincuencia se volvían más comunes.
Aunque su familia intentaba mantenerlo alejado de esos problemas, no podían controlar el impacto que la vida en las calles tenía sobre él. En la escuela, Nahuel empezó a juntarse con chicos mayores que ya estaban involucrados en pandillas. Su mejor amigo, Lucas, fue uno de los primeros en ser reclutado por una de las bandas más importantes del barrio. Lucas comenzó a distanciarse de Nahuel, pero su amistad seguía siendo fuerte. Fue Lucas quien, más tarde, empujó a Nahuel a entrar en ese mundo oscuro.
Durante estos años, Nahuel empezó a involucrarse en pequeños actos que parecían inofensivos, como realizar recados o entregar mensajes entre bandas. Lo hacía bajo la premisa de proteger a su familia y a sus amigos, convencido de que era la única manera de garantizar su seguridad en un entorno tan peligroso.
Inmersión en las bandas (16-17 años):
A los 16 años, Nahuel se encontraba en medio de una lucha interna. Por un lado, quería continuar con sus estudios y seguir siendo el chico tranquilo y amigable que todos conocían. Por otro lado, sentía la creciente presión de las bandas y el poder que ellas ejercían sobre el barrio. Fue entonces cuando dio su primer paso más importante en el mundo criminal.
Lucas, quien para entonces ya era un miembro respetado de la banda, lo presentó oficialmente al líder. Aunque al principio Nahuel no quería involucrarse, la promesa de proteger a su familia fue lo que lo hizo cambiar de opinión. Durante este tiempo, Nahuel fue desarrollando una doble vida: ante su familia seguía siendo el chico respetuoso que trabajaba y estudiaba, pero en las calles se estaba convirtiendo en alguien respetado por su astucia y su habilidad para mantenerse frío en momentos de peligro.
El crecimiento en la estructura criminal (18 años):
El año más decisivo en su adolescencia fue cuando cumplió 18 años. Durante este tiempo, la banda de la que formaba parte comenzó una guerra con un grupo rival por el control del territorio. Nahuel, aunque inicialmente evitaba la violencia directa, fue empujado a tomar un rol más activo en las operaciones de la banda.
Su habilidad para anticipar los movimientos de sus enemigos y su capacidad para organizar planes lo convirtieron en un miembro clave. No era un líder formal, pero muchos lo respetaban y confiaban en él para tomar decisiones estratégicas. Su frialdad en momentos críticos lo hizo destacar. Nahuel se ganaba la confianza del líder de la banda, convirtiéndose en su mano derecha para los asuntos más delicados.
A lo largo de este tiempo, Nahuel desarrolló una reputación ambivalente en el barrio. Algunos lo veían como un protector, alguien que hacía lo que debía para mantener la paz y defender a los suyos. Otros, sin embargo, comenzaban a temerlo. Los rumores sobre su lado oscuro crecían, y aunque Nahuel intentaba mantener una fachada amigable, su implicación en la violencia de las bandas era innegable.
El punto de quiebre:
A los 18 años, Nahuel estuvo involucrado en un tiroteo durante una reunión con la banda rival. Este evento marcó un punto de quiebre en su vida. A pesar de intentar mediar y evitar el conflicto, la situación escaló rápidamente y Nahuel tuvo que tomar decisiones difíciles para proteger a sus compañeros. Aunque salió ileso físicamente, el trauma de ese día lo cambió profundamente.
Después de este evento, Nahuel empezó a cuestionarse si realmente quería seguir en ese mundo. Sabía que había cambiado y que la oscuridad que ahora llevaba dentro no era algo que pudiera ignorar fácilmente. Pero a pesar de estos sentimientos de duda, estaba demasiado atado a su banda como para simplemente abandonarla.
Resumen de su adolescencia:
Conflicto interno de Nahuel Francisco (Resumen):
El mayor desafío de Nahuel es la lucha entre su naturaleza bondadosa y su implicación en el mundo oscuro de las bandas. Aunque desde pequeño fue conocido por su buen corazón y deseos de proteger a su familia y amigos, el ambiente violento de su barrio lo llevó a tomar decisiones que lo alejaron de esos valores.
Dualidad entre el bien y el mal:
Nahuel siempre quiso hacer el bien, pero la necesidad de proteger a los suyos lo arrastró al mundo criminal. A medida que fue ganando respeto en su banda, desarrolló una habilidad para la estrategia y la manipulación, lo que le permitió mantenerse alejado de la violencia directa. Sin embargo, los momentos de confrontación lo marcaron profundamente, como el tiroteo a los 18 años que lo hizo replantearse su vida.
Culpa y deseo de redención:
Nahuel vive con la culpa de sus acciones y anhela escapar de esa vida. Sueña con alejarse, empezar de nuevo y encontrar redención, especialmente ante su familia. Sin embargo, sus lazos con la banda y el miedo a dejar atrás a sus compañeros lo detienen.
Miedo a la soledad y resignación:
Teme que al abandonar la banda, pierda su sentido de pertenencia y quede solo. También lucha con la creencia de que es demasiado tarde para cambiar, aunque en el fondo conserva la esperanza de poder elegir un destino diferente.
Estuvo un rato largo armando la ficha, espero que esta vez les guste mas y pueda ser llamativa para todos. :cool:
- Nombre completo: Nahuel Francisco
- Edad: 20 años
- Nacionalidad: Argentino
- Personalidad: Tranquilo y amigable, con un lado oscuro vinculado a su participación en una guerra de bandas.
Apariencia física:
Nahuel es un joven delgado pero fuerte, con cabello oscuro y desordenado, y ojos marrones que pueden ser cálidos y fríos. Suele llevar una chaqueta que oculta tatuajes de su paso por el mundo criminal.
Historia:
Infancia:
Nahuel nació en el corazón de Buenos Aires en 2004, en un barrio donde las familias trabajaban incansablemente para llegar a fin de mes. Su casa era pequeña, pero siempre estaba llena de vida. Los olores a comida casera, el sonido de la radio, y las voces de su familia formaban parte de su día a día. Creció rodeado de amor, pero también de desafíos.
Su padre trabajaba como mecánico en un taller local, un hombre de pocas palabras pero dedicado. Desde muy pequeño, Nahuel lo acompañaba al trabajo, donde aprendió a usar las herramientas y comprendió el valor del esfuerzo. Veía cómo su padre llegaba agotado al final del día, cubierto de grasa, pero siempre con una sonrisa cuando estaba en casa. Su madre, en cambio, trabajaba como empleada doméstica en casas de gente adinerada, lo que la mantenía fuera la mayor parte del día. Cuando regresaba, traía historias del "otro mundo", una vida que Nahuel apenas podía imaginar.
Durante su niñez, Nahuel fue conocido en el barrio por su buen corazón. Era el chico que ayudaba a los ancianos a cargar las bolsas de las compras, el que cuidaba a los más pequeños y siempre estaba dispuesto a colaborar con lo que fuera necesario. Su familia inculcó en él el valor de la solidaridad, lo que lo hizo querido por los vecinos.
A pesar de su bondad natural, Nahuel siempre fue consciente de las tensiones que rodeaban su entorno. Desde pequeño, escuchaba las historias de peleas entre pandillas en las calles cercanas, de robos y ajustes de cuentas. Aunque su familia intentaba mantenerlo alejado de esos temas, él sabía que no podía ignorar la realidad del barrio en el que vivía.
Relaciones tempranas:
Uno de sus primeros amigos cercanos fue Lucas, un chico dos años mayor que él, cuyo padre había muerto en un enfrentamiento entre bandas. A pesar de esa tragedia, Lucas y Nahuel desarrollaron una amistad profunda basada en la lealtad y el apoyo mutuo. Juntos exploraban el barrio, compartiendo sueños de un futuro mejor, lejos de la violencia que los rodeaba. Sin embargo, Lucas comenzó a alejarse poco a poco, atraído por la vida de las pandillas, algo que más tarde también arrastraría a Nahuel.
El conflicto en casa:
Con el paso de los años, la situación en su hogar se volvió más tensa. Su padre, preocupado por la creciente influencia de las bandas en el barrio, advertía constantemente a Nahuel de los peligros. Pero el joven, aunque respetuoso, no podía evitar sentir la atracción de ese mundo. La promesa de protección para su familia y amigos, así como la necesidad de pertenecer a algo más grande, lo empujaron a involucrarse, a pesar de las advertencias.
El momento decisivo para Nahuel llegó cuando tenía 15 años. Un grupo de pandilleros comenzó a acosar a su familia, exigiendo "protección" a cambio de no causarles daño. Aunque su padre intentó enfrentarse a ellos solo, fue Nahuel quien intervino, decidido a defender lo que era suyo. Fue en ese momento cuando comenzó a participar activamente en las calles, convirtiéndose en parte de una de las bandas locales.
Adolescencia de Nahuel Francisco:
Los primeros años de cambio (13-15 años):
A los 13 años, la vida de Nahuel comenzó a cambiar drásticamente. El ambiente en su barrio se volvía cada vez más tenso, con la presencia de bandas criminales que comenzaban a dominar las calles. A medida que crecía, Nahuel fue perdiendo la inocencia de su niñez, enfrentándose a una realidad en la que la violencia y la delincuencia se volvían más comunes.
Aunque su familia intentaba mantenerlo alejado de esos problemas, no podían controlar el impacto que la vida en las calles tenía sobre él. En la escuela, Nahuel empezó a juntarse con chicos mayores que ya estaban involucrados en pandillas. Su mejor amigo, Lucas, fue uno de los primeros en ser reclutado por una de las bandas más importantes del barrio. Lucas comenzó a distanciarse de Nahuel, pero su amistad seguía siendo fuerte. Fue Lucas quien, más tarde, empujó a Nahuel a entrar en ese mundo oscuro.
Durante estos años, Nahuel empezó a involucrarse en pequeños actos que parecían inofensivos, como realizar recados o entregar mensajes entre bandas. Lo hacía bajo la premisa de proteger a su familia y a sus amigos, convencido de que era la única manera de garantizar su seguridad en un entorno tan peligroso.
Inmersión en las bandas (16-17 años):
A los 16 años, Nahuel se encontraba en medio de una lucha interna. Por un lado, quería continuar con sus estudios y seguir siendo el chico tranquilo y amigable que todos conocían. Por otro lado, sentía la creciente presión de las bandas y el poder que ellas ejercían sobre el barrio. Fue entonces cuando dio su primer paso más importante en el mundo criminal.
Lucas, quien para entonces ya era un miembro respetado de la banda, lo presentó oficialmente al líder. Aunque al principio Nahuel no quería involucrarse, la promesa de proteger a su familia fue lo que lo hizo cambiar de opinión. Durante este tiempo, Nahuel fue desarrollando una doble vida: ante su familia seguía siendo el chico respetuoso que trabajaba y estudiaba, pero en las calles se estaba convirtiendo en alguien respetado por su astucia y su habilidad para mantenerse frío en momentos de peligro.
El crecimiento en la estructura criminal (18 años):
El año más decisivo en su adolescencia fue cuando cumplió 18 años. Durante este tiempo, la banda de la que formaba parte comenzó una guerra con un grupo rival por el control del territorio. Nahuel, aunque inicialmente evitaba la violencia directa, fue empujado a tomar un rol más activo en las operaciones de la banda.
Su habilidad para anticipar los movimientos de sus enemigos y su capacidad para organizar planes lo convirtieron en un miembro clave. No era un líder formal, pero muchos lo respetaban y confiaban en él para tomar decisiones estratégicas. Su frialdad en momentos críticos lo hizo destacar. Nahuel se ganaba la confianza del líder de la banda, convirtiéndose en su mano derecha para los asuntos más delicados.
A lo largo de este tiempo, Nahuel desarrolló una reputación ambivalente en el barrio. Algunos lo veían como un protector, alguien que hacía lo que debía para mantener la paz y defender a los suyos. Otros, sin embargo, comenzaban a temerlo. Los rumores sobre su lado oscuro crecían, y aunque Nahuel intentaba mantener una fachada amigable, su implicación en la violencia de las bandas era innegable.
El punto de quiebre:
A los 18 años, Nahuel estuvo involucrado en un tiroteo durante una reunión con la banda rival. Este evento marcó un punto de quiebre en su vida. A pesar de intentar mediar y evitar el conflicto, la situación escaló rápidamente y Nahuel tuvo que tomar decisiones difíciles para proteger a sus compañeros. Aunque salió ileso físicamente, el trauma de ese día lo cambió profundamente.
Después de este evento, Nahuel empezó a cuestionarse si realmente quería seguir en ese mundo. Sabía que había cambiado y que la oscuridad que ahora llevaba dentro no era algo que pudiera ignorar fácilmente. Pero a pesar de estos sentimientos de duda, estaba demasiado atado a su banda como para simplemente abandonarla.
Resumen de su adolescencia:
- Amistades: La influencia de Lucas fue clave para su entrada en las bandas. La lealtad hacia sus amigos del barrio fue una de las razones que lo empujaron a involucrarse más profundamente en el mundo criminal.
- Doble vida: Durante su adolescencia, Nahuel manejó una vida doble: por un lado, el chico tranquilo y trabajador; por otro, un miembro astuto y calculador dentro de la banda.
- Escalamiento en el crimen: A los 18 años, se convirtió en una figura clave dentro de la banda, respetado por su inteligencia y su habilidad para mantener la calma bajo presión.
- Conflictos internos: Aunque estaba profundamente involucrado en las pandillas, Nahuel siempre tuvo un conflicto interno sobre el tipo de vida que estaba llevando. Después del tiroteo, comenzó a considerar seriamente la idea de salir de ese mundo, aunque sabía que no sería fácil.
Conflicto interno de Nahuel Francisco (Resumen):
El mayor desafío de Nahuel es la lucha entre su naturaleza bondadosa y su implicación en el mundo oscuro de las bandas. Aunque desde pequeño fue conocido por su buen corazón y deseos de proteger a su familia y amigos, el ambiente violento de su barrio lo llevó a tomar decisiones que lo alejaron de esos valores.
Dualidad entre el bien y el mal:
Nahuel siempre quiso hacer el bien, pero la necesidad de proteger a los suyos lo arrastró al mundo criminal. A medida que fue ganando respeto en su banda, desarrolló una habilidad para la estrategia y la manipulación, lo que le permitió mantenerse alejado de la violencia directa. Sin embargo, los momentos de confrontación lo marcaron profundamente, como el tiroteo a los 18 años que lo hizo replantearse su vida.
Culpa y deseo de redención:
Nahuel vive con la culpa de sus acciones y anhela escapar de esa vida. Sueña con alejarse, empezar de nuevo y encontrar redención, especialmente ante su familia. Sin embargo, sus lazos con la banda y el miedo a dejar atrás a sus compañeros lo detienen.
Miedo a la soledad y resignación:
Teme que al abandonar la banda, pierda su sentido de pertenencia y quede solo. También lucha con la creencia de que es demasiado tarde para cambiar, aunque en el fondo conserva la esperanza de poder elegir un destino diferente.
Estuvo un rato largo armando la ficha, espero que esta vez les guste mas y pueda ser llamativa para todos. :cool: