Antonio Miller, PDR,

[Jeremiah_Lance]

Imagen actual de Lamond

Información Básica

Nombre completo: Antonio Miller
Edad: 20 años.
Altura (en cm): 175.
Peso (en KG): 65.
Color de ojos: Marrones.
Color de pelo: Negro.
Rasgos característicos: Barba en forma de candado, cicatriz en la rodilla.
Nacionalidad: Estadounidense.
"Raza": Afroamericana.
Ocupación: En paro.
Inclinación sexual: Heterosexual.

Enfermedades y lesiones sufridas.

Apendicitis- (Curado)
Rotura de tibia y peroné- (Curado.)
Disparos (4): Abdomen- Sin secuelas (Curado)
Costillas- Sin secuelas (Curado)
Pecho- Cicatriz (Curado)
Pierna izquierda-Sin secuelas (Curado)
Fractura de radio (brazo derecho)- (Curado)

Adicciones

Marihuana- Controlada en la medida de lo posible.
Cocaína- Reduciendo la adicción y el consumo.
Bebidas con gas- Sin tratamiento.
Tabaco- 3 meses sin fumar tabaco pero posible recaída.
Tatuajes- Sin tratamiento.

Virtudes

-Rápido y ágil.
-Inteligente.
-Bueno con los objetos que puedan montarse y desmontarse. (armas, tostadores, móviles, motores)
-Amigable.

Defectos

-Muy desconfiado.
-En algunas situaciones piensa demasiado.
-Burlesco en situaciones inoportunas.
-Persona de mecha corta.

Indumentaria

Vestimenta de diario: (principalmente ropa cómoda)

-Pantalones de chandal cortos o largos o bien vaqueros cortos.

-Camisetas de tirantes, manga corta, sin camiseta o con chaquetas y sudaderas (por el invierno y demás)

-Zapatillas deportivas (Air Max, Air Jordan etc)

- Puede llevar algo de joyería.

-Gorros, gafas de sol, todo lo que le venga en gana día a día.

Vestimenta Formal.

-Trajes, americanas, chalecos de vestir.

-Pantalones de vestir, a conjunto con el traje o vaqueros "pitillo".

-Relojes, joyería cara y demás lujos.

-Gafas de sol, importantes para cuando va de traje, le dan más confianza.

Familia, amigos y conocidos

Carlitos Miller: Hermano de misma edad, vive en su misma manzana.
Jonh Miller: Hermano del medio, aún vive con mamá.
Rodolfo Miller: Hermano menor, también vive con mamá y Jonh.
Enzo Julian: Amigo de la infancia, al día de hoy vive a unas cuadras de su casa, mantienen relación.
Frank Davies: Primo de Antonio, reside frente a su casa, se ayudan mutuamente.
Ricardo Montaner: Primo de Antonio, vive a unas casas de las suya, se juntan todas las tardes.
Tito Schneider: Amigo de infancia, mantienen relación.
Hanna Murphy: Amiga de la ciudad y novia de su primo Frank, se ayudan mutuamente.

Descripción física

-Antonio es un chico de estatura media, delgado, todo lo que tiene es músculo con lo cual aparenta estar fuerte. Pelo negro y corto, no le gusta llevar más de tres dedos de dos dedos de pelo en la cabeza, rapado con la parte de arriba algo más larga.
Es un chico de tez negra clara, con un par de pendientes y con una variedad de tatuajes, brazos, piernas, espalda etc. Nariz y labios dentro de lo normal, orejas de un tamaño pequeño acorde con la nariz y los labios, sonrisa algo amarillenta debido al cigarro y una barba en forma de candado que repasa cada dos o tres días.

Descripción psicológica

Antonio es un chico listo y atento, es bueno con los estudios pero no significa que no los dejara, al principio una persona alegre pero poco a poco su carácter se va tornando un tanto más áspero y amargo. Es paciente pero de mecha corta, llegado a un punto no sabe controlarse y es un caos. No le gusta atarse a nada, prefiere vivir sin demasiados compromisos de ahí que nunca haya sacado nada bueno de una relación.

Historia conocida

Antonio Miller nació un 26 de agosto de 2004 en el hospital general de San Fierro, fue un niño normal que vivía con sus padres, los cuales se mudaron a Los Santos estableciéndose en el Corona.

Los primeros años de su infancia fueron los más felices, vivía con sus padres, le gustaba el colegio e hizo nuevos amigos en el barrio donde vivía, además de que jugaba con sus hermanos y sus primos, siempre con una sonrisa en la cara. Los problemas empezaron cuando este cumplió los siete años, sus padres no dejaban de discutir, al parecer su padre era un ludópata pero no se ha conseguido confirmar aún, pese a que la separación de sus padres fue una situación dura, los mismos siempre mantuvieron una relación amistosa y de ayuda e incluso a veces quedaban a escondidas. Siempre le dieron lo mejor a Antonio y sus hermanos.

Poco después, Antonio y sus hermanos se marcharon a vivir con su padre ya que su madre tuvo que irse a San Fierro por problemas de trabajo, ambos acordaron que los niños se quedarían en Los Santos por el tema del colegio amistades y demás. A los trece años Antonio, demás y su padre se marcharon por el aumento de la población latina en el Corona, lo cual empezó a preocupar a su padre. Padre e hijos se fueron a vivir a Seville, Antonio no tenía permitido salir, ya que en esa época pese a ser buen estudiante y tener facilidad en ello empezó a faltar a la escuela, con compañías que no le favorecían.

Años más tarde con dieciséis años recién cumplidos todos se mudaron a Ganton, cerca de la rotonda, poco más tarde el padre de Antonio le compró una casa en Seville, en uno de los bloques de apartamentos, el volvió al Corona donde trabajaba de mecánico y donde posteriormente fue asesinado. Antonio empezó a los dieciséis años a moverse por la rotonda de Ganton donde a día de hoy lo conoce bastante gente, es uno de los integrantes de una pandilla que se mueve por la ciudad.

Capítulo 1: El inicío.

.Joder... debería haber empezado esto antes ir paso a paso pero me la suda, bueno recuerdo que llegué al barrio hace un tiempo, no conocía a nadie y demás nunca salía pero llegué a la rotonda que es lo que cuenta. Era de noche y me senté en los bancos bajo el puente, mis hermanos dormían, se me acercaron dos negros y empecé a hablar con ellos sobre todo un poco, me di una vuelta con alguno de ellos, íbamos en sus bicis, a la pizzería o alguna mierda así, recuerdo que empecé a moverme con un par de negros, yendo a pintar y toda la pesca, siempre hacíamos algo, fui conociendo a muchos de ellos y a llevarme bien con gente que tarde o temprano se convertirían en mi familia.-La llegada de Antonio al barrio fue fácil, el "abandono" de su madre lo formó con un caracter duro y eso ayudo mucho a este a encajar en el barrio y lo consiguió, sin problemas, sin líos, siempre pensando en lo que era bueno y lo que no para su integridad física.

Capítulo 2: Empezando con las movidas.

Bueno... recuerdo que poco después de empezar a moverme por Ganton me reencontre con viejos sujetos que eran mis primos, hace bastante no sabia nada de ellos, charlamos un buen rato, nos pusimos al día y nos dimos cuenta que teniamos las mismas intenciones.. Paso tiempo, los chavales se movían conmigo y viceversa. Hurtábamos en las tiendas, robábamos bicis, nos peleábamos con latinos y demás, atracábamos a peatones, siempre metiéndonos en líos. De pronto un día andando por Liverpool tras habernos metido en un lío nos encontramos con negros de la rotonda que estaban de camino a la pizzería. Después de comer y beber allí, volvimos al barrio por Liverpool, los hijos de puta nos dispararon, fue la primera vez que me dieron un tiro, me dolía mucho, notaba como me quemaba, lo que no sabía era que no sería la ultima vez que esto me pasaría.-Tras lo ocurrido la forma de ser de Antonio se volvería un poco más agresiva, pues confiaba menos en la gente que no conocía.

Capítulo 3: Entrada en el correccional.

Kush, como muchos le llamaban.. pasó tiempo luego de aquel "tiroteo" donde sufrió heridas, dejemos eso atrás... Antonio seguía haciendo-se ver por el barrio, ganando dinero con algún que otro atraco a ferreterías, vendiendo las cosas que robaba y demás, su forma de ser cambiaba igual que el mismo poco a poco se formaba en la calle.
Recuerdo que tras llevar un tiempo ya por allí conocí a un negro llamado Hache, que es como mi hermano ahora, el fue quien empezó a hablarme sobre las cosas que pasaban en el barrio y a confiar en mi. Poco después de haberlo conocido, subimos en un coche de un negro, nos fuimos a dar una vuelta y nos paró la policía, la cosa se complicó... recuerdo que me metieron en el coche, yo pensaba que simplemente me ficharían en comisaría y poco más pero no fue así, me llevaron a la correccional y me encerraron dos meses. Allí la tensión se podía cortar con un puto cuchillo, los seguratas hacían apuestas y les pasaban navajas, sprays de pimienta, palos... simplemente para divertirse, para que los que estábamos encerrados nos matásemos unos a otros. Recuerdo que dejé en golpeado a un latino en las duchas y que unos blancos estuvieron a punto de morir de una sobredosis de la droga que les pasé allí dentro. Pero tras los dos meses salí de allí con la cabeza bien alta.
-La forma de ser de Kush se habría vuelto más dura debido a la estancia en la cárcel, poco a poco iba cambiando su forma de ser y su carácter debido a los acontecimientos ocurridos.

Capítulo 4: Volviendo a las andadas.

Tras la salida de Antonio del reformatorio, este se notaba con ganas de retomar el tiempo perdido tras esos dos meses, lo primero que hizo fue avisar a sus  negros de confianza Jota y Jw reunirlos en su casa y cambiarse de ropa propuso un golpe a un bar cerca de las colinas, no sacarían como para vivir de ello, pero al menos ganarían en una noche lo que solían ganar en casi dos meses de curro intenso. Los tres decidieron ir al bar, a una hora en la que solo solían quedar los típicos borrachos del lugar, el trío de negros entró cuchillo en mano al bar gritando que todo el mundo se mantuviera quieto y que se tiraran al suelo, todos bastante asustados hicieron lo que estos pedían, Jota se encargaba de los civiles que estaban allí colocando-los en fila lejos de la puerta de entrada, Jw por su parte se acercó al camarero, le ató las manos con unas bridas y le sustrajo las llaves de la caja fuerte y la caja registradora, Kush, se aseguró de que no hubieran cámaras en el lugar, cerró la puerta del bar por dentro y tras esto empezó a ayudar a Jw. Todo parecía ir de perlas hasta que Kush escuchó como alguien hablaba por teléfono, rápidamente se acerco al baño y allí lo vio, un civil escondido hablando por teléfono llamando a la policía, Kush se rebotó y empezó a golpes con el civil, mientras Jw tenía ya todo el dinero en una bolsa. Ambos primos trataron de avisar a Kush, pero este seguía propinando una paliza al civil ya inerte en el suelo, con la cara llena de moretones y sangre, sus acompañantes consiguieron sacarlo de allí como podían, Kush se había visto amenazado, podía haber vuelto al reformatorio nada más salir por eso. Por suerte los tres consiguieron abandonar el lugar minutos antes de que la policía llegara allí con refuerzos para atrapar a los asaltantes. Bastante lejos del lugar Kush muy serio y con las manos llenas de sangre repartía el dinero y se marchaba.
-Después de lo sucedido, Kush se volvió un tanto más amargo, había dado una paliza a un civil, arruinando-le la vida, desde entonces empezó a elaborar más sus planes de robo y se dispuso a tomar medidas de seguridad tales como nunca llevar cartera a los robos.

Capítulo 5: Recaída.

Menuda mierda negro, recuerdo esto como si fuese ayer, estaba muy jodido por todo, seguía comiendo-me la cabeza con lo del blanco al que jodí, a parte murió mi padre y todo me parecía una auténtica mierda. Una noche recuerdo que me obsesioné con sacar una maqueta de trap, joder me salen las mejores piezas cuando voy colocado hasta las cejas, pero esa noche era diferente, quería olvidarme de todo haciendo la maqueta, así que empecé porro tras porro, pastilla tras pastilla y raya tras raya, no se cuanto me metí en el cuerpo, solo recuerdo llamar a JW para decirle que quería enseñarle la maqueta y despertar dos días después en el hospital. Me contaron que mientras hablaba con JW me quedé callado y se escuchó un gran golpe, JW, Hache y Enzo vinieron corriendo a ver que había pasado. Me había dejado hasta la puerta abierta, entraron y estaba yo tendido en el suelo, con no se ni cuanta mierda en sangre. Me llevaron como pudieron al hospital donde estuve dos días en coma, por suerte desperté. Desde ese día siempre trato de no meterme mucho muy seguido, no quiero palmar de una sobredosis así sin más.
-Desde ese momento Antonio(Kush) respeta más las drogas, pero a la vez poco a poco se siente más dependiente de ellas.

Capítulo 6: Vienen tiempos mejores

Tras su recaída en las drogas Kush, curiosamente, andaba más centrado en moverse por Ganton, y entonces fue cuando ocurrió. De pronto dos de los negros a los que siempre había visto por la rotonda lo llamaron, Estos empezaron a hablarle sobre cosas que le sonaban, que muchos le habían comentado y culminaron con un: "¿Sabes lo que es la FBC?", desde ese mismo instante, Kush empezó a saber que todo lo que hacía era visto por los negros importantes, que estos lo habían seleccionado de entre muchos negros para que formara parte de ellos, tras la charla, Kush orgulloso se dirigió al salón de tatuajes, donde su primera estrella sería tatuada. Pocas horas después, Hache como un hermano para el le dio la noticia, ahora tendría permiso para vender droga en las calles, proporcionada por el mismo. Antonio empezó a vender drogas por las cercanías, lo tenía fácil, un chaval con labia, vendía las cosas pronto y llegaba con el dinero para antes de cenar, se lo daba a Hache y este le daba una parte, poco a poco, fue pillando más y más el gusto a esto, tanto al dinero, como a vender droga.-Nuevo cambio en su forma de ser, este ahora miraría más por los negocios y no tanto por la diversión, pero sin dejarla de lado.

Capítulo 7: Grandes tratos

Después de su entrada triunfal como pequeño camello en la pandilla y de su pronta integración en la venta de drogas Antonio empezó a querer ganar más dinero.Lo recuerdo, ostia puta si lo recuerdo, una temporada muy jodida, creo que habían días que dormía dos horas si llega, acabé muerto de esa mierda. Recuerdo que empecé a buscar a gente que quisiera droga pero en buena cantidad, ya pasaba un poco más de los chavales que venían a pedirme un gramo, les pasaba la droga con menos ganas, así que me lancé a buscar a grandes compradores. Conseguí varios compradores y me sentía orgulloso, me dijeron que me avisarían en unos días. No contento con eso empecé a ir a las tiendas a robar cosas que dieran guita, me apetecía tener pasta, cuando no estaba poniendo-le una navaja al cuello a un dependiente, estaba robando unas gafas de sol o unas ganzúas para venderlas luego. De pronto sucedió, la primera llamada, me puse muy nervioso pero conseguí superarlo, el tío en cuestión me pedía cincuenta gramos de hierba y cincuenta de hachís, algo fácil, quedamos, me dio el dinero, le indiqué donde estaba la droga y el, la recibió. Estaba contento joder.

Capítulo 8: Grandes tratos grandes problemas

Como todo en esta vida cambia a Antonio le pasó algo parecido, algo que definitivamente cambiaría su forma de ser y mermaría su confianza en desconocidos, le llegó una llamada, alguien quería droga en cantidad, como es obvio, Kush siguió su rutina, preparó la droga, la dejó en cierto lugar y tras esto fue a reunirse con el comprador, esta vez era un motero, no lo había visto nunca así que Antonio guardaba las distancias. Todo fue bien, o eso pensaba el, recibió el dinero pero una vez lo tenía el tipo le dijo que quería que lo acompañara a por la droga, no se fiaba, ninguno del otro. Tras discutirlo un rato Kush accedió a ello y fueron por el material. - Joder la cosa se puso complicada, no era el motero ese no, el problema eran otros, pillamos la mierda y le dije que me dejara en donde nos habíamos reunido pero entonces nos cayeron, apareció un coche que estaba al tanto de esto y empezó a pegar tiros, salimos con la moto a toda ostia, venían a llevarse-lo todo, la droga, la pasta... ¡Y una mierda!, salimos lo rápido que pudimos y nos escondimos en un lugar "seguro", los dos empezamos a discutir, no sabíamos quienes nos buscaban, de pronto vimos a uno de los ocupantes del coche acercarse, el no nos vio pero nosotros si, pille mi bate y le solté con todas mis fuerzas en una rodilla, el tío se retorcía del dolor empecé a preguntarle sobre quien los enviaba pero no decía nada, ¡joder gritaba mucho!, así que le di en la cara y lo dejé inconsciente, salí corriendo tras esto y me escondí en mi casa. Desde ese momento supe que había gente que me buscaba, me habían visto involucrado con los negros de la rotonda y ahora era un blanco fácil, debía andar con cuidado.- Kush deja de confiar en los desconocidos, primero los tantea y luego trata de contactar con ellos.

Capítulo 9: Regla numero uno, si robas pringas algún día.

Todo empezaba como de normal obviamente, salía de noche, un par de canutos, un par de cervezas, alguna línea y de pronto se acercó mi hermano de otra madre Hache, me dijo que confiaba en mi para algo importante así que lo seguí hasta su casa, me dio una mochila con un portátil y un casco de moto, me hizo subir y se puso rumbo a algún lado que yo desconocía. De camino me estuvo contando un poco, alguien quería que le lleváramos una Huntley que quería, todo parecía fácil, pero entonces Hache me lo soltó todo... ¡Ostia puta, robar en casa de un poli! ¡Cabrón le has dado a la coca demás!, mi reacción fue la ostia en ese momento, estaba acojonado... llegamos allí y al parecer todo estaba de nuestra parte, bueno eso creíamos, malditos ilusos, llegamos al coche, subimos y de pronto BEEEEP BEEEEP BEEEEP.
Ambos salieron de la casa lo más rápido posible pero no tuvieron oportunidad de escape, los estaban esperando, nuevamente metido en este tipo de problemas Kush volvería a verse encerrado. La condena fue menor ya que ambos cooperaron, aún así se les añadieron el cargo de posesión de armas ilegales y sustancias ilícitas.

Capítulo 10: Tranquilidad.

Un tiempo borroso en la mente de Antonio, un tiempo de paz, de tranquilidad, de vida prácticamente, fiestas allí y allá, ganancias de dinero por todas partes, menor presión por parte de la policía, en ese tiempo la conoció una chica del barrio, nunca la había visto, pero simplemente vio en ella algo que le atraía.
-Joder que si me acuerdo, hacía unos meses había perdido a una gran amiga y ella tenía aspectos que me recordaban a la difunta, pero joder, me quedé colgado desde ese puto día, como si me hubiera metido ochenta gramos de hierba al cuerpo, me quedé como atontao...
-No mucho después las cosas se torcerían por todas partes, parecía que la tranquilidad no podía durar más de cuatro o cinco días...
-Antonio siente algo por esta chica lo que le hace estar un poco más ido de la cabeza con sus comidas de coco.

Capítulo 11: Amistad en las buenas y en las malas.

Puta madre, recuerdo esto como si fuera ayer, todo pasó muy rápido, estábamos en el barrio tranquilos cuando vino un tío a pedir droga, todo normal, me acerco a la ventanilla, empiezo a hablar con el y de pronto el tío me saca un jodido revolver y me lo pone en la cara, ¡Menudo subnormal!, me atraca delante de todos los nergos como si estos fueran a quedarse quietos y claro de pronto cuatro armas apuntaban al tío, lo hicieron bajar y empezamos entre todos los negros a amenazarlo. Joder, yo quería cargarme-lo y empecé a soltarle de ostias impulsivamente recuerdo que me gritaron que parara pero yo seguí, en unos segundos todos los negros estaban dando-le patadas y pisotones al tipo en el suelo y de pronto se nos fue de las manos... pillé una motosierra y lo partí por la mitad. La gente se quedó con la boca abierta estaban jodidamente asqueados, el tío ahí partido por la mitad...
-Entonces sucedió, Hache quien había criado a Kush vio lo que podía pasar-le a este si los azules se enteraban de esto, cogió la motosierra de las manos de Kush y cargó con todas las culpas, ambos lanzaron el cuerpo del tipo al agua en el canal y limpiaron la calle de sangre.
-Hache me salvó el culo y no pude hacer nada por el... lo ultimo que recuerdo de ese día fue ver salir a Hache de una casa ndo con la cara hinchada tras una paliza.
-Kush tomaría a Hache como un hermano y desde entonces su relación entre ambos sería mucho mas suelta y amigable.

Capítulo 12: R.I.P

Todo empieza una tarde, Antonio sale de casa con las pilas cargadas tras dormir prácticamente un día entero, se reúne con sus negros de confianza y empiezan los trapicheos, unos vendían la droga, otros estaban robando, pero siempre en zonas cercanas donde podían defenderse, pillaban algo para beber con las bicis y tal todo tranquilo, un poco de rutina, o eso parecía. Todo empieza cuando en uno de los robos la cosa sale mal, todos salen corriendo y dos de los negros suben a un coche y se marchan, la policía los siguió a ambos.
-Me acuerdo ver a Jotta subir al coche... no sabía que no volvería a verlo... me acuerdo que se armó un pitote de la ostia todos escondiéndonos y los dos negros en el coche con cinco patrullas detrás... los perdimos de vista, volvimos al barrio y tras dos horas salí a buscarlos con la moto de Hache. Allí me lo encontré todo, Jotta muerto, acribillado por la policía cuando intentaba escapar a pié, no creía lo que veía no me dejaron acercarme a mas de 500 metros pero yo lo ví a el...
-Kush habría perdido a un amigo que se había criado con el, o eso pensaba... por lo tanto se volvería un tanto más serio al haber visto un chaval inocente acribillado por la policía, su vida en el vecindario cambió un poco hasta el día de hoy luego de presenciar con sus propios ojos esta escena...

[lautaroarg]

absolute cinema

[bliss]

Te felicito por tu fantástica ficha de personaje. Mas que aceptada, obtendrás tu punto de rol.